A partir del 28 de abril de 2021 se presentaron expresiones masivas de protesta social y movilización en Colombia. Las manifestaciones se extendieron por más de 20 días, provocando bloqueos y una situación general de incertidumbre y tensión.
El manejo de estas protestas, especialmente en medio de la pandemia por COVID-19, representó un desafío tanto para el gobierno nacional como para los gobiernos municipales, que en muchos casos reaccionaron con el uso de la fuerza pública.
En esta coyuntura, las administraciones municipales de Florida y Pradera decidieron abrir espacios de diálogo con las personas que hacían parte de las manifestaciones. En algunos casos usaron metodologías o guían entregadas por FOINCIDE, y desde el proyecto se están documentando las lecciones aprendidas por las administraciones municipales.
Estas experiencias refuerzan la necesidad de utilizar el diálogo como una herramienta para transformar conflictividades sociales en lo local: “como alcalde, me convencí de que hay gente que no se acerca a la administración municipal, pero requiere atención”, señala Justino Sinisterra, alcalde de Pradera; “La gran salida es el diálogo”, menciona Alexander Orozco, alcalde de Florida.
